Nació el 4 de octubre de 1754 en Doumis, (Auvernia, Francia) Sus padres fueron Pedro Jarrige y María Célarier. Fue la menor de siete hermanos. 

Durante sesenta años vivió en la pequeña ciudad de Mauriac (departamento de Cantal en Auvernia, Francia), dedicada plenamente a obras de misericordia a favor de los pobres, enfermos, huérfanos, encarcelados y a la enseñanza del catecismo a los niños.

Decidió dedicar su vida a los pobres, a los «heridos de la vida», como terciaria dominica y tuvo que renunciar a la danza, que entonces estaba prohibida en la Orden, aunque los dominicos la proponen como Patrona de los profesionales de la danza.

Se durmió en el Señor el 4 de julio de 1836 , y fue sepultada en la Iglesia mayor de Mauriac. Su entierro fue multitudinario.